Se trata de una colección de fotografías de fácil digestión visual pero de profundo significado. Vivimos rodeados de magníficas construcciones realizadas con enormes esfuerzos pero que se encuentran en estado de ruina y abandono. Intemperie entra dentro de estos espacios y genera una reflexión íntima y personal.
Abandono, desolación, desprotección. Nada puede ser bello a menos que haya sido expuesto por un tiempo determinado a merced de los elementos. Así pues, la lluvia, el polvo, el sol, el viento y una buena medida de dejadez son ingredientes necesarios para convertir en bello algo que fue común y ordinario. Aguda entropía de cristales rotos