Alfredo es un adolescente que acude con el público al laboratorio del verso para que Juliana le enseñe cómo se compone un soneto. Utilizando sonetos de obras teatrales del siglo XVII y artilugios como la fabulosa máquina generadora de versos, no sólo transportarán al público a esa época sino que convertirán a los espectadores en sílabas, acentos, estrofas¿